El ministro de Relaciones Exteriores de Irán, Abás Araqchí, arribó este sábado a Roma, Italia, para sostener una segunda fase de negociaciones con el objetivo de alcanzar un consenso sobre el programa nuclear de la nación persa.

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Las conversaciones se llevarán a cabo de forma indirecta entre Araqchí y el enviado especial para el Medio Oriente del Gobierno estadounidense, Steve Witkoff, a través de la mediación de diplomáticos omaníes, una semana tras la primera fase de negociaciones realizada hace una semana en Mascate (Omán).

“La República Islámica de Irán siempre ha demostrado, con buena fe y sentido de responsabilidad, su compromiso con la diplomacia como vía civilizada para resolver los problemas, con pleno respeto a los altos intereses de la nación iraní”, declaró el portavoz del Ministerio de Exteriores iraní, Ismail Baghaei, quien acompaña a Araqchí. 

El representante señaló que son «conscientes de que no es una ruta sencilla, pero actuamos con la mente receptiva, fundamentándonos también en la experiencia previa».

Teherán y Washington valoraron el primer encuentro realizado hace una semana en Mascate como constructivo, aunque hay discrepancias en cuanto al ámbito de las negociaciones.

Estados Unidos ha propuesto desmantelar el programa nuclear de Irán, a lo que Teherán ha replicado que no es negociable. 

«Unas demandas (de EE. UU.) que sean poco realistas únicamente reducirán la posibilidad de llegar a un acuerdo», declaró ayer el líder de la diplomacia iraní en una conferencia de prensa conjunta con el ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, en Moscú.

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